martes, 21 de junio de 2016

La historia interminable de Michael Ende

Tras una enorme pausa (no de lectura pero sí de reseñar) volvemos con las reseñas. Esperemos que el verano, además de leer más, me deje tiempo para poner en orden mis ideas.

La Historia Interminable es uno de esos libros de los que todo el mundo habla, porque han formado parte de su infancia, pero que yo no había leído. En mi casa nunca hubo una copia medio desencuadernada, llena de polvo y puede que hasta mordida por el paso de las generaciones.

Todo el mundo con el que merecía la pena hablar de literatura fantástica adoraba ese libro, y poco a poco picaron mi curiosidad. Aunque hay una película, no la he visto y no puedo comparar.

La Historia interminable nos habla del viaje de  Bastián Baltasar Bux, un chaval soso y acomplejado, lleno de problemas, al mundo de Fantasía.  Bastián es un devorador voraz de libros, que roba un libro llamado "La Historia interminable" y decide saltarse las clases para leerlo a escondidas en el desván del colegio. Cuan grande es su sorpresa cuando se descubre protagonista de la historia del libro que está leyendo y se da cuenta que tiene un papel que cumplir en la misma. 

Su misión es dar un nuevo nombre a la Emperatriz infantil, que agoniza de muerte. Le ayudarán en su viaje Atreyu y su dragón Fuju. Por el camino se han de encontrar con multitud de peligros y animales fantásticos, aunque lo peor que le puede pasar a Bastián es que olvide quien es, y no encuentre un motivo para volver de Fantasía. No quiero contar más, merece la pena darle una oportunidad.

Literariamente es magistral, el recurso al bucle temporal, al camino infinito, a las dudas existenciales que se reflejan en el mundo de Fantasía ya ese "vacío" que lo va comiendo todo, nos hacen reflexionar desde la primera página. En las ediciones más antiguas, o en las de tipo coleccionista, cuando Bastián esta en el mundo real hay un color en la tinta de las páginas, suele ser el rojo, mientras que el color en Fantasía es el verde. Cada capítulo empieza con una letra del abecedario, que es la primera letra de la primera palabra, simplemente sublime.

Entre mis personajes favoritos esta Atreyu, ese joven campesino que trata de ayudar a Bastián, aunque él no se deje, por encima de lo que era esperable. Es el compañero fiel, el amigo de verdad que pone un punto de cordura a las ansias de grandeza de Bastián. Todos somos Bastián, todos nos perdemos en nuestro ego, en la visión que podemos proyectar de cara al exterior y nos lleva a perdernos en nosotros mismos. Todos querríamos tener la importancia de salvar de la muerte a la Emperatriz Infantil dándola un nuevo hombre. Fantasía solo es el mundo de los sueños, el mundo donde todos querríamos vivir.

Cuando llegué al final me emocioné, deseando poder seguir leyendo más. Si bien me ha llegado un poco tarde en la vida, no me ha impedido disfrutarlo como una niña. Sin duda lo volveré a leer, lo aconsejaré y formará ya parte de mí para siempre. Es una lectura que da que pensar, que nos ayuda a reflexionar y que nos llena de conversación con esas personas con las que compartimos el vicio de devorar libros. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario